Dia 7 Seguimos en Cuzco

Hoy nos hemos levantado mucho mejor del mal de altura, y nos hemos animado a seguir con el turismo por la ciudad. Sinceramente, tampoco nos lo hemos tomado muy en serio, porque no hemos entrado en ninguna iglesia ni catedral ni hemos salido de un radio de 15 minutos andando del centro histórico de la ciudad. 

Pero hemos podido hacernos una idea de lo que esta ciudad puede ofrecer al turista, normalmente de paso entre los que vienen para aclimatarse a la altura antes de hacer el machu pichu y los que vienen después de visitar el machupichu para descansar unos dias antes de seguir ruta por el Perú. 

Basicamente el centro historico son un conjunto de calles antiguas en las que se alternan tiendas y puestos de souvenirs, oficinas de touroperadores, tiendas de joyas en plata (y lo que parece plata pero no es), restaurantes de comida europea y bancos donde cambiar dolares y euros por moneda local. 

Poco se puede encontrar de caracter local, salvo una callecita de tiendas de tejidos al corte y ovillos de lana de alpaca, y el mercado de San Pedro, un autentico descubirmiento. En él se dan cita tanto los puestos de carne, verdura, pan, especias, legumbres, infinitas variedades de patatas y maices, como puestos donde comer comida tradicional peruana a precios asequibles o tiendecitas de piedras semipreciosas y minerales, mieles y tés, galletas y panecillos, frutos secos y muchas otras delicatesen locales. 

Pero ojo, cierra a las 6 de la tarde, ya que no tiene luz artificial, asi que por la noche, los que buscan algo para cenar podran encontrar los puestos callejeros de comida que se sitúan a su alrededor, vendiendo desde pinchos de carne, pollo o salchicha por 3 soles (1 euro), platitos de chicharones de pollo por 2 soles (cuellos de pollo fritos), pan de queso por 1 sol, arroz con leche por 1 sol, dulce de 3 leches por 1 sol.... un menu completisimo por monedas sueltas. Hasta palomitas de un maiz riquisimo dejan un aroma en la calle delicioso. 

Si no fuera por los interminables atascos y los humos de los colectivos (buses) que con el poco oixigeno que hay ya de por si, hacen irrespirable el paseo por la ciudad. Y eso que hoy hemos estado de arriba a abajo todo el dia. Necesitabamos comprar el bus hacia puno, y nos ha costado un poco mas de lo que pensabamos. Aqui son las fiestas patrias y los tickets de bus vuelan, pero afortunadamente tenemos hueco en uno. Tambien hemos visitado a un orfebre que habia localizado en internet Ruben Dario, propietario de la joyeria Oro inka. Quería hacer un curso de joyeria con el, ya que utiliza una tecnica de fundicion tradicional del Peru inca y que ya no utiliza nadie,  pero ya hace tiempo que no hace los cursos, asi que simplemente estuvimos viendo su taller, charlando con el.y comprando unas barritas de plata pura para trabajarlas aqui. 

Poco mas dio de si el dia y tras el paseo noxturno con la luna llena alumbrando la plaza de armas retornamos al hotel para preparar la mochila para mañana salir hacia el Machu Pichu, otro de los checks de una interminable lista de cosas que visitar antes de diñarla. 

Mañana mas.